martes, 15 de julio de 2014

NO ES LA FAMILIA, ES QUE DIOS "NO" EXISTE



Por Amaury German Martínez

“El problema es la familia” se ha convertido en  la respuesta favorita de todo aquel que le busca una explicación a los horrores que a diario reportan los medios de comunicación.

Lo cierto es que los que así piensan, ignoran que la culpa radica no en la familia, sino en el triunfo de la idea que viene coordinada mediante una bien estructurada política internacional dirigida a que la población mundial no crea en Dios.


Usted se podría preguntar, y por qué hacer que la gente no crea en Dios? La razón se cae de la mata; Porque a partir de ahí no hay obstáculo para hacer lo que se quiera, porque así “na e ‘na” cosa esta que nos abre la puerta de par en par para cumplir los deseos sin importar la conciencia y sino hay conciencia entonces nada es malo. Esa cultura de manera básica la han promovido los políticos y de ahí otros segmentos de la población como es el caso de los parafílicos.

POLITICOS

Cuando decimos políticos nos referimos a los que ostentan ‘el poder”. Para los que ostentan el poder es importante desmitificar la figura del Padre Celestial, por cuanto la corrupción es su aliada y socia. A partir de la no creencia en Dios, solo hay que crear las condiciones para garantizar la impunidad. Si Dios no existe, a quien rendirle cuenta? Si Dios no existe, puedo hacer todo y nada me sucederá. No hay temor. Se entendió?

PARAFILICOS

Hasta el año de 1975, se consideraba la homosexualidad como una parafilia, después de allí, apoyados en el extraordinario crecimiento de ese grupo, iniciaron un proceso de presión a los políticos de USA, entiéndase gobierno, que dio al traste con que el Congreso y las instituciones de USA, sacaran a la homexualidad del grupo de la parafilia. Obviamente que eso va en contra de natura, es decir, Dios, consecuentemente ese sub grupo, junto a los que todavía se consideran como anormales sexualmente hablando, como lo es el caso de los sádicos, sadomasoquista, voyeristas (brecheros) pederastas y otros, promuevan la no existencia de Dios, por la razón de que si no existe se cae el argumento de “hombre y mujer” como único género, y de ahí que no habría motivo para impedir que se casen, que formen "familia".

Si bien es cierto que es en la familia que se fomentan los valores y los principios, no menos cierto es que no es esta quien tiene la culpa de la pérdida o desuso de los mismos, sino el triunfo de la propagación de la idea de la inexistencia de Dios. Puesto si El no existe, no hay familia.    
IR ARRIBA